Este capacitor de arranque es ideal para motores eléctricos que requieren un impulso adicional para iniciar su funcionamiento. Con un rango de capacidad de 400-480 MFD y un voltaje de operación de 110-125V, es compatible con una amplia gama de aplicaciones industriales y domésticas. Su diseño robusto garantiza un rendimiento duradero, asegurando que el motor reciba el impulso necesario para su arranque sin fallos. Es un componente esencial en sistemas eléctricos que buscan optimizar la eficiencia energética y prolongar la vida útil del motor.